Como la desvergüenza de ese clero del nacional catolicismo, capitaneado por el ciudadano Bernardo, más conocido por el señor de las Breñas, nos produce rubor por el uso de la sin razón para, entre los más sofisticados métodos de marketing, muy creativo y de difusión que se vienen utilizando para vender productos y domesticar a la sociedad de consumo, en La Laguna estamos viendo por doquier cantidad de grandes paneles de publicidad que, ¡suponemos, han debido costar un ojo de la cara!, usados por las multinacionales empresariales a lo que se ha sumado esa gran multinacional del nacional catolicismo para dejar al descubierto sus apostasías y desvergüenzas.
Por Aguere han aparecido cientos de costosos carteles publicitarios suscritos por los que se titulan como: Colectivo Pro Construcción del Obispado que nosotros nos permitimos, dentro de la lógica del pensamiento y si cabe hasta con disculpas para aquellos que se puedan sentir ofendidos cuando decimos: calificamos como “inconsciente colectivo” en ese concepto básico de la teoría que estudió Sigmund Freud, en relación a contenidos de la “psiquis” que está más allá de la razón
Y la razón de la sinrazón que nuestra razón nos indica de tal manera que nuestra razón enflaquece. Ciertos alardes de determinados religiosos cuyos comportamientos pueden perfectamente considerarse como vulgares burlas al manipular el legítimo dolor de los laguneros por el incendio del Palacio Salazar (sede del obispado católico) y que ahora lo instrumentalizan con llamadas a los bolsillos de la ciudadanía para que aporten su óvulos dinerarios, muebles de estilo de maderas preciosas (caracolillo, caoba, morera, tea, ébano, de estilo clásico y antiguo, cuadros pictóricos de buena factura para formar una millonaria pinacoteca que, influyan y den prestancia y lujo a esa vanidad y parafernalia de quienes se conducen como una religión de Estado, aquella que fundara, partiendo de los primitivos cristianos, el emperador romano, Constantino.
A la vez recordar, para anteponer la vanidad y la soberbia del obispo de la diócesis de San Cristóbal de La Laguna, así como de tanto sacerdote que se conducen como auténticos gentiles, de aquellos que decía Cristo:
Si Cristo, nuestro hermanos mayor e hijo de Dios nació en un portal, como paradigma de la humildad y el amor dándonos su ejemplo en la entrada de Jerusalén, como el rey, el mesías ( la celebración del domingo de Ramos ) a lomos de un borrico, como el animal irracional más sencillo y humilde nos lleva, además, a poner como ejemplo la Teología del borrico por su humildad y capaz de aguantar las más pesadas cargos sobre su lomo, aquella pesada carga que el Señor puso a San José María iba a poner, en su inexplicable bondad sobre sus espaldas, el día de la fundación de su obra, el Opus Dei.
Finalizamos recordando a quienes se conducen por esos caminos del pecado de la vanidad de la concupiscencia más descarada y del vil metal, con la epístola del rico epulón, según el evangelio de Lucas, en sui géneris interpretación, “tostado y molido”: Que es la confirmación de que el dinero enajena al hombre, rompe toda relación con Dios, por uso y abuso egoísta de la riqueza y la posición social, perdiendo credibilidad y confianza como son las “hazañas” del señor de las Breñas y todo ello referido a la vida después de la muerte. Según la enseñanza de Lucas, creemos que no se trata de promesa a los pobres de una felicidad posterior en recompensa de su pobreza sino una indicación a la resignación. Se trata de la descripción de una escena de las más bellas parábolas de Jesús: la del pobre Lázaro y el rico Epulón. Es la necesidad de solidaridad y caridad cristianas cada vez más ausentes de nuestras convivencias ciudadanas y sobre todos de aquellos que se consideran poseedores del bien y del mal en exclusiva. AMEN, AMEN
Fidel Campo Sánchez