Un artículo suscrito por el amigo don Manuel J. Armas, en que manifiesta que quiere a
Evidentemente que
En lo político, venga a convenir con nosotros, don Manuel, que los dependentismo con Madrid dejan sin personalidad a los partidos que no pueden laborar por un nuevo socio político que les conduzca a recobrar la fuerza y la personalidad de aquel Ayuntamiento que presidiera don Pedro González, el alcalde de la impronta artística que nunca hubiera permitido que el espacio socialista fuera ocupado en gran medida por ese sui géneris nacionalismo representando por el mercantilismo de CC-PNC, principal hándicap que encuentra la partitocracia en estas ínsulas, en las que el electorado se deja manipular debido a los sentimientos de nacionalidad en la que se fundamentan las demagogias para lograr sus objetivos.
Por otra parte nosotros notamos lo condicionado de los políticos, curiosamente en un estado laico, con esa Iglesia del nacional catolicismo franquista, ante la que bajan la cerviz no dándose cuenta que tienen o están tomando posiciones, si se quieren hasta nacionaleras pero que en ese nacionalismo mercantilista ven una buena coyuntura para inculcar determinados conceptos de soberanía, de ahí el mal ejemplo del cura Báez y del otro mea pilas Bello, que no es casualidad sino que es algo dirigido. ¡Piensen en eso ya que vemos un peligro muy cercano!
Vemos una frivolidad al decir que algunos/as hacen política de fin de semana, de lunes a viernes en Madrid. La fuerza de sus votos le permite a la doña Ana Oramas poder tener un alcalde en funciones lo que no le impide ponerse al frente de cualquier manifestación, como la hemos visto reivindicando el pasado domingo la lucha contra el cáncer de mama donde, casualmente notamos la ausencia de las féminas del PSOE lagunero, podrá ser demagogia pero la realidad es que la alcaldesa si estaba allí. Los socialistas nunca han sido capaces de darse cuenta que los votos no solo están en
No se trata de llorar, de lamentarse cual plañideras, sino de ser políticos objetivos y estudiar los fallos que impiden hacer política de consenso y no contribuyendo a espantar en los plenarios a la ciudadanía que concurre a los mismos a la que les preocupa muy mucho los insultos, las descalificaciones al oponente cuyo final es contrario a los objetivos que persiguen, truncándose en demagogia de la más barata. Don Manuel, caro amigo, usted es mucho lo que puede hacer para que sus peleones correligionarios cambien, ya que necesitan más educación de la que vienen mostrando, más altura de miras y sobre todo unidad para que ese PSOE lagunero no termine de romperse.
No cabe la menor de las dudas, como usted bien señala que, gobernar es respetar a la oposición, aunque ésta sea la que tiene la mayoría, diríamos nosotros. Los debates que in situ hemos presenciado dicen todo lo contrario, precisamente no por usted al que siempre hemos visto con mucha mano izquierda y educación, educación que se nota que mamó de pequeño, no así otros. Lo que nos apunta sobre
Lo que si debemos significarle lo que creemos respecto a lo que es oposición que, no es llevar la contraria por sistema. Oposición es trabajar por el bien general y poner éste por encima de cuestiones personales y partidistas, es procurar que
Si efectivamente es cierto que le duele
Fidel Campo Sánchez