COLECTIVO CIUDADANO EL BERODE
Señoras y señores concejales
Nuestra intervención obedece al punto núm. 8… del Orden del Día sobre la moción de Código ético del buen Gobierno que presenta el portavoz del Grupo Municipal Socialista, don Gustavo Matos.
Por ello con la venia y como no podía ser menos decimos: No todo vale en política. Ni las manipulaciones, ni las palabras altisonantes, ni el cinismo ni los silencios cómplices como últimamente parece que pudiéramos estar viviendo por parte de esa oposición al Gobierno. Por aquello de que nobleza obliga mostramos nuestra más contundente repulsa a los panfletos anónimos conducentes a dañar la imagen de las personas, en el caso que nos ocupa, el ciudadano don Fernando Clavijo, nuestro alcalde, víctima de la envidia y la cobardía y la insidia y lo que encontramos deleznable, por parte de la oposición, que no lo hayan condenado, no hayan dicho ni mu. Se nota, se nota que la ética, los valores y los principios son desconocidos para algunos, lo que de muestra que una cosa es predicar, pedir códigos éticos y otra muy distinta es vender trigo, predicar con el ejemplo.
Pero vamos al punto del Orden del Día.
¿Para qué han servido las referencias sociales en las civilizaciones cultas y modernas? Nos tememos que para nada, lamentablemente vemos que para muy poco pues la pérdida de valores y la corrupción lo han invadido todo. Cada persona tendrá su valor, pero lo que tenemos muy claro, es que hay preceptos que son valores universales y que están muy por encima de las ideas y de las religiones.
El dilema se plantea en torno a si el "fin justifica o no los medios", el sí "todo vale" para conseguir objetivos. Irremisiblemente la sociedad que acepte ese sistema se autodestruirá. Y decimos que se destruirá, porque lo primero que hará será destruir todo aquello que se contraponga a sus proyectos. Y la historia ha demostrado a lo largo de su existencia, que todos los pueblos que han exterminado a otros, han acabado fagocitados.
Sólo es posible cambiar los conceptos sociales, cuando es un clamor popular el cambiarlos. Pero cuando una sociedad está divida, o camina entre el progresismo y el conservadurismo, como es la nuestra; El gobernar menospreciando los valores de una parte de la sociedad, en la que las encuestas le dan mayoría a los presuntos corruptos indefectiblemente desemboca en la beligerancia. ahora después del caso Gürtel y otros similares en Canarias, pretenden fundar una sociedad basada única y exclusivamente en lo que ellos "y sus creyentes" creen, como base de una sociedad progresista; menospreciando todas las ideas que portan la otra mitad de los "no creyentes", que consideran, que, los conceptos basados en la ética, la moral y el honor, son los que deben regir una sociedad sana que hasta ahora no hemos visto por ninguna parte y nos tememos que todo eso se quedarán en agua de borrajas, pues, ni a los unos y a los otros les interesa que el pueblo soberano les pueda fiscalizar., por lo que nos permitimos recomendar se utilice la pedagogía del buen ejemplo, que diría el amigo don Paco Galván, alto funcionario del Consistorio y que nosotros nos permitimos usar para recordar empresas que son utilizadas por el Ayuntamiento, a modo de franquicias, como Innova y su hijuelas, donde vemos contenidos de tráfico de influencias y nepotismo, que recoge el C.P.. Por lo tanto, lo que pretende establecer CC y el PP, sólo puede acabar como "el Rosario de la Aurora".
Nos tememos que la moción pudiera terminar con la presunta buena intención del portavoz de Grupo Socialista que desea se finalice el nepotismo y conchabeo que nos viene ofreciendo el “régimen” nacionalero de CC. ¡Ojala y para bien nos equivoquemos”, pero nos tememos que será víctima del rodillo de la mayoría . Aunque, por otra parte debemos recordarle al ponente que por su condición de letrado conoce que esa figura ya existe en la legislación penal art.426 y se denomina “cohecho pasivo impropio”. El problema no es que fallen las normas sino que cuando nos toca nos negamos a que sean aplicadas para mantener en sus cargos a los sujetos implicados. El hombre es un ser libre, con capacidad de autodeterminación, es decir, capaz de obrar luego de una libre elección, tanto en lo moral como el derecho y los usos sociales, forman parte de un todo mayor: La ética, que es la parte de la filosofía que trata de la valoración moral de los actos humanos, normas que regulan las actividades de los individuos: ética profesional y ética política.
El preámbulo de la Constitución cuyo 31 aniversario acabamos de celebrar establece: Justicia, libertad, seguridad y garantiza la convivencia democrática conforme a las leyes y a un orden económico y social. Consolida el Estado de Derecho. Protege a los ciudadanos, al pueblo soberano, en el ejercicio de los derechos humanos, Promueve el progreso de la cultura y la economía para asegurar dignidad y calidad de vida. Colaborar en el fortalecimiento de relaciones pacíficas y eficaz cooperación entre todos los pueblos de la tierra. En definitiva, las Cortes aprueban y el pueblo soberano ratifica mediante referéndum.
El objetivo es lograr auténtica justicia social, que es obtener una más justa distribución de la riqueza, para ello es necesario una política capaz de general equilibrio y un gobierno que no sea indiferente a los problemas sociales para asegurar mínimos de bienestar para todos, sin demagogias, nepotismos, tráficos de influencias, en definitiva la corrupción que parece ser la moda.
Podemos afirmar y afirmamos que si los políticos que administran los destinos de los pueblos actuaran con sentido de responsabilidad y convicciones de que están ahí para servir y no para servirse de la confianza que les damos los demás, veríamos y viviríamos muestras de gran solidaridad, economías pujantes que, evidentemente, se destinarían a compartir con ese mal llamado tercer mundo que nos está llevando a llenarnos de vergüenza al ver que, mientras se dilapidan los recursos en cuestiones banales otros, nuestro prójimo carece de lo más fundamental para poder vivir y compartir un auténtico desarrollo sostenible para todos, no sólo para unos pocos, los de siempre, aquellos que globalizan todo apartándose de la ética y de mínimos principios morales.
Señoras y señores concejales, para que reflexionen les dejamos lo siguiente de Aristóteles: Siendo el bien el fin y el objeto de todas las ciencias y artes, el mayor bien en su grado sumo es la justicia, es decir el interés general, es el fin de la ciencia superior a todas ellas que es la política.
Y finalizamos deseándoles para el próximo ejercicio político, concordia y que sea el consenso, el diálogo y no las zafias descalificaciones, el partidismo y las ansias personales de protagonismo lo que impere, ya que para el bien de nuestra ciudad se precisa un cambio de conductas.. FELICIDADES A TODOS.