Rafael Becerra, manifestó como "un gran despilfarro de dinero”, ya que ha costado 154.000 euros que pudieron dedicarse más que a la parafernalia a necesidades sociales importantes de las que carece La Laguna, en nuestra opinión y merced a todo lo que se le tolera a la tal Cerrillos, con su arquitectura del siglo XXI, cada vez menos patrimonio histórico, en donde es precisamente el Ayuntamiento quien predica pero no practica con el ejemplo: ¡lo más estrecho del embudo para el paganini y lo ancho para la política errática que impone esta señora o señorita.
El edil Rafael Becerra, con el que coincidimos en este aspecto, explicó que inicialmente su Grupo político se planteaba entre otros, un acto institucional mediante la colocación de una placa conmemorativa en un edificio catalogado propiedad de la corporación, así como el reconocimiento público a los iniciadores del expediente del X Aniversario de La Laguna como Patrimonio de la Humanidad, e infinidad de actos culturales como conferencias, exposiciones fotográficas, actos musicales, hasta la edición de un libro conmemorativo del hecho. En nuestra humilde opinión y coincidencia se debió buscar con un equilibrio entre actos y los recursos, que en la ejecución los mismos se debían aplicar, evitando derroches por la acusada situación económica que se está viviendo en la actualidad pese a lo cual se aprovecha cualquier oportunidad para la irresponsabilidad y las campañas pre electorales que sólo conducen a descapitalizar más las arcas del Consistorio en la vanidad y la petulancia descarada.
El concejal reivindica que no es ético y mucho menos lógico gastar en fastos tal cantidad de dinero y a la par haber aprobado una subida del precio del agua y, nosotros añadimos, la aplicación de nuevos impuestos de licencias de apertura, carteles anunciadores de comercios, en virtud de la ordenanza municipal actualizada que no contempla, después de muchos años, la posibilidad de que los ya establecidos y que pagan religiosamente sus impuestos hayan podido perder las antiguas licencias, lo que nos lleva a pensar que existe una tendencia a recaudar por recaudar y dedicar los dineros para fastos ridículos, sueldos millonarios en lugar de para erradicar la suma pobreza que padecen algunos de nuestros congéneres.
Por otra parte debemos señalar la necesidad de un albergue municipal para acoger a tantos y tantos indigentes que se ven obligados a pasar la noche en los bancos de la Plaza Abajo, al intemperie, y otros en los soportales del edificio de los juzgados, de la Telefónica o del Ayuntamiento, situación que viene a poner en evidencia que para que realmente La Laguna, nuestra entrañable ciudad, pueda presumir de ser Bien Cultural y Patrimonio de la Humanidad, debe comenzar por lavar la imagen que estamos dando al no tener mínima dedicación a los indigentes que carecen de aquel lugar que en tiempos pasados y, más preocupados por los desheredados de la fortuna había, donde estuvo el Matadero Municipal y hoy se está levantando un faraónico edificio, con el consiguiente despilfarro que supone el derribo del ya existente que está en inmejorables condiciones y no es necesaria su eliminación habida cuenta que lo más lógico sería que lo nuevo se uniera a lo anterior y que encontramos inexplicable el n o hacerlo así habida cuenta del concepto que sobre la economía parecen tener algunos ediles Licenciados en Económicas. Cosas veredes, querido conciudadanos cuando vemos que no se coge el sartén por el mango, como lamentablemente viene ocurriendo.