Es un purificador, de sentimientos espirituales y materiales, es un enorme embudo capaz de absorber todo lo malo, que del ser humano puede manar: la envidia, la maldad, la mentira, la falsedad, la infidelidad, el egotismo, la mutilación de vidas, etc. El Amor es la materia que no se puede ver, porque no se puede tocar, por ser un espíritu pero que sin ningún lugar a dudas existe en nuestros sentidos El Amor, es la transformación, de las materias que nos hacen ser culpables, de los adjetivos descalificativos, anteriores mencionados, el Amor es el embudo, capaz de absorber, toda la maldad, que introduzcamos en el, para depurar todo lo malo que tengamos, como seres humanos, Es transformar materia y espíritu. las materias, capaces de hacernos cómplices del desamor, Es el purificador, capaz de destilar y clasificar, separando la bondad de la maldad, el Amor no tiene tintes políticos, es el antídoto capaz de estabilizarnos y darnos cordura y sentido común de lo que hagamos cada día y es compatible, con nuestro seres queridos, amigos, vecinos, y con toda la humanidad sin racismo ni clases sociales. El Amor no tiene límites es infinito, no pone condiciones, Es lo más puro que podemos compartir tanto los pobres como los ricos, el Amor es la salvación del mundo, lo testificó un ser que fue humano hace 2009 años ¡ Ustedes lo conocen, se llama Jesucristo!
Aminetu Haidar, es un gran ejemplo de Amor y de actualidad, ojalá los que tienen a su alcance la salvación de esta gran mujer, usen los valores y descarten los intereses materiales y usen el embudo que trasforma lo malo en Amor.
M. Marrero.
