Si nacer es el comienzo de vivir, y vivir con dignidad es lo que deseamos los presentes, porque no mejoramos las vidas, de los que mueren cada día en este mundo tan indiferente, pues, morir en cuanto a los cosas que pertenece a la realidad, a los valores y como dijera Moliére:” Se muere una vez, pero durante mucho tiempo”,
Cuando salió a la luz, la noticia de las vacas locas, todo el mundo fue informado, de que no comiéramos carnes de vacas que no fuesen analizadas sus carnes, por temor a que pudiésemos, contaminarnos, y por ello sacrificaron millones de bóvidos. Lo mismo sucedió con la fiebre de los pollos, quemaron millones de pollos en donde existía la epidemia, esto fue una noticia mundial, se movieron millones y millones de dólares, en difundir la noticia de los animales sacrificados. ¿Es que ya se terminaron las epidemias o ¿será que no he recibido la infamación?.
Les voy a dar una noticia que seguro no va a tener la difusión como la que tuvo la de las vacas, locas o la de los pollos,
Anoche a las doce de la noche murieron cuarenta mil personas, y se esperan que esta noche a la misma hora mueran casi cuarenta mil mas, estas noticias no han salido a la luz porque los gobiernos del mundo no la quieren difundir, para no alarmar a la población, y les diré que es verdad lo que les estoy contando, y me da mucha pena que estas noticias no salgan a la luz, para tapar las ineficacias de los irresponsables que nos gobiernan en este mundo, que llamamos civilizados, y por el poder del dinero, se llevan por delante a cualquiera que trate de impedírselo. Ayer murieron cuarenta mil y hoy morirán otros tantos porque el hambre los está matando y solo un puñado de héroes, están en primeras filas luchando para tratar de ayudarlos. Estos nacieron para morir.
Y nosotros para tratar de sobre vivir, pero también me siento culpable de esa exterminación, silenciosa que nos hace cómplices del holocausto, El holocausto judío no lo podemos remediar pero este de ahora es nuestra responsabilidad y no nos vamos a arruinar. Que está presente cada día y que si quisiéramos los que tenemos la oportunidad de frenarlo con un poco de solidaridad lo que vale un café al mes, exterminaríamos el hambre de este mundo insolidario.
El sentido común nos puede salvar.
MIGUEL MARRERO EXPOSITO