El que suscribe el presente, cristiano convencido exhorta a los católicos laguneros a no rendirse frente a esa "batalla pacífica, incruenta" que venimos combatiendo frente a la vanidad y soberbia por los desajustes de credibilidad religiosa que han motivado las actuaciones del obispo de la Diócesis de San Cristóbal de La Laguna y que, nosotros los cristianos rezamos para que surja la luz y aparezca la humildad que se necesita para tener el rebaño en paz y esperanza..
Ante los desbarajustes contra la fe, la violencia en actuaciones, la apología terrorista religiosa y las miserias de los dirigentes del nacional catolicismo que obliga a muchos a abandonar sus prácticas religiosas, es necesario descubrir "nuevas perspectivas capaces de devolver la esperanza al hombre y a la mujer lagunera. Ante esa "batalla pacífica" y recordamos a los fieles de nuestro Cristo de La Laguna que Él busca hombres y mujeres que le ayuden a afianzar su victoria con sus mismas armas, "las de la justicia, la verdad, la misericordia, el perdón y el amor", que desde hace tiempo se echan en falta en nuestra entrañable ciudad, de La Laguna
El Cristo necesita hombres y mujeres que le ayuden a afianzar su victoria con sus mismas armas: las de la justicia y de la verdad, de la misericordia, del perdón y del amor, y añadimos, en un tiempo de carestía global de alimentos, de desbarajuste financiero, de pobrezas, de cambios climáticos preocupantes, de violencias y miserias que obligan a muchos a abandonar su tierra buscando una supervivencia menos incierta, de terrorismo de cualquier digno, siempre amenazante, de miedos crecientes ante un porvenir problemático, es urgente descubrir nuevamente perspectivas capaces de devolver la esperanza al pueblo de Dios. La sociedad necesita justicia, verdad, misericordia, perdón y amor y subrayamos que es mensaje que deseamos cale en los responsables religiosos y no el de la vanidad y las parafernalias en apariciones den televisiones cual viene haciendo el obispo lagunense de las Breñas que ha llevado a dar preferencias a un palacio episcopal que fue pasto de las llamas, víctima de una congregación religiosa que sólo la vemos actuando alrededor del dios dinero y de la desidia a sus responsabilidades.
Señalamos la necesidad de la reconciliación entre el ordinario de las Breñas y el pueblo lagunero, aunque difícil posible, pero… para ello es indispensable la abolición de la norma 516 sinodal y restituir procesionalmente la Escuadra de Gastadores de Artillería de nuestro Santísimo Cristo de La Laguna para un futuro de seguridad común y de pacífica convivencia invitamos a las partes a proseguir de manera renovada, perseverante y sincera los esfuerzos para lograr una solución al conflicto Iglesia católica y pueblo lagunero. Nosotros nos permitimos asegurar aseguró que la resurrección de Cristo permite a los hombres responder a la pregunta ¿qué hay después de la muerte? con la respuesta de que la muerte no tiene la última palabra, ya que, al final, la vida es la que triunfa.
La resurrección, en absoluto, es una teoría, sino una realidad histórica revelada por el hombre Jesucristo. No es un mito, ni un sueño, no es una visión ni una utopía, no es una fábula, sino un acontecimiento irrepetible, hasta que retorne victorioso a restablecer la justicia.
Fidel Campo Sánchez
