29.9.09

LO GOTICO EN LA FAMILIA ZAPATERO

Las hijas del presidente de Gobierno del Estado español vestidas de negro gótico, un color lamentable y en vías de prohibición en lugares elegantes y de protocolo, para ciertas cuestiones. Bueno, todavía no, aunque lo parece y hasta deseable. Hay personas que son la vergüenza del mundo político porque no saben elegir los trajes correctos para hacerse la foto junto al presidente de Estados Unidos y su señora. Pero ellos, que hace 50 años no podían ir a la universidad por el color de su piel, ahora viven en la residencia del centro del poder político mundial. Y al parecer las hijas del presidente español que visten de negro, no representan con la dignidad de un Estado europeo, en la forma de vestir para estar junto al matrimonio Obama, el representante de la nación más importante del mundo.

Zapatero y sus responsables de protocolo se descuidaron, y no avisaron que la foto, en el Museo de Nueva York, no podía hacerse pública. Metieron la “chacarona” la pata. Pero quizá valió la pena para conocer cuánto odio se esconde dentro de miles de cabecitas que leen periódicos y páginas digitales, o las dirigen. La difusión de la foto con sus ropas negras góticas sirvió para que millones de españolitos y canaritos se puedan reír de ellas. Puedan hacer montajes fotográficos denigrantes y dar pie a los lectores a soltar toda la bilis acumulada. El presidente del Gobierno español es un ser odiado por los nostálgicos del franquismo, los ultras del PP y las hijas de ZP así como el color del Obama y señora deben injusta y racistamente pagarlo. Pues no, nos da la gana de permitirlo aunque reconozcamos el fallo garrafal.

Se ríen de las niñas de ZP. Desconociendo que es la Ley del Menor, bueno sí, para ellos es esa ley que hay que reformar para poder meter en la cárcel a los niños violentos y no a los padres culpables, o para repartir a los africanos por las comunidades autónomas. Hay osados columnistas que dicen que el presidente también pasa de la Ley del Menor, que sólo es una excusa por haber mantenido a sus hijas estos últimos cinco años escondidas, porque está avergonzado de su pinta. Otros piensan que no tiene autoridad porque las deja vestir así. ¡Que como va a mandar el país un señor que no es capaz de imponer la ropa adecuada a sus hijas!

Quizás tengan razón. Quizás deberían tener otro papá más indigno cual pudiera ser cualquier dirigente del PP o de los conchabados en el caso Gürtel. Les gustaría tener un papi como Aznar para que les organizara una boda en el Monasterio de el Escorial. Que eligiera de padrino a gente tan decente como Silvio Berlusconi. Que trajera como invitado a gente tan respetable como Alberto Cortina (6 meses antes de ser condenado a la cárcel por estafa) o la pandilla de Correa, los de el entramado Gürtel. A gente tan demócrata como Manuel Fraga. A cantantes tan españoles como Julio Iglesias, o tan veteranos como Raphael, que también viste de negro, como las hijas de ZP. Las niñas de Zapatero podrían decir, sin ambages de ninguna especie: Nuestro papi debería imponerse y si una de nosotras se casa, debería ordenar al alcalde de la ciudad que arregle las calles para la despedida de soltera. Qué envidia sentimos de Anita Aznar, que se vistió de pija y se casó en el Escorial cuando su papá era presidente, muchos de los periódicos que estos días nos denigran dedicaron grandes alabanzas a aquella boda que convocó a gente tan importante y tan corrupta

Las hijas góticas de Rodríguez Zapatero, desearán agradecer a todos su atención, sus insultos, su enterramiento de la Ley del Menor. Para eso están, para poner su culito y que los que quieran patear a papá lo hagan sobre sus nalgas cubiertas por las negras telas. Dicen que por qué llevan botas militares. Vaya, vaya. ¿Será mejor vestir zapatitos de tacón y entrar en el Escorial delante de los “pacifistas” de las Azores que acudieron como padrinos y dieron caché a la boda de Anita?

Las hermanas góticas, dirán que no nos merecemos esta condena pública. Porque el hábito, contrariamente al dicho popular, hace al monje. Y los monjes, las monjas y los obispos saldrán la próxima semana a manifestarse contra la ley del aborto que aprobó papá. Nos imaginamos que a esa manifestación irán miles y miles de defensores de la vida, de los no nacidos. Y llenarán las portadas de los periódicos que dirigen los mismos que estos días, a las dos niñas de ZP, las tratan como malnacidas aunque no desean su muerte porque así, vivitas y vestidas de góticas, son más útiles para sus bastardos intereses.

No obstante nuestra reflexión final debe dirigirse a que tanto el presidente del Gobierno del Estado español, como su familia, ya que deben guardar la debida compostura en tanto en cuanto al protocolo y no servir de diana y acicate contra todo lo que se mueve, como acostumbra a hacer la oposición y una parte del conservadurismo a cuyo frente siempre se ponen los clérigos del franquismo que introducían al dictador bajo palio en los templos y de lo que sienten grandes añoranzas.

Y para finalizar recordar nuestro pasado de inconformistas tomando como referencia a los Beatles y otros especímenes parecidos y que muchos hemos olvidado la cruz con la que tenían que cargar nuestros padres, nos permitimos poner en boca de Rodríguez Zapatero aquel ripio de Quevedo: Usad mi nombre, y abusad del ripio cabrones.

FIDEL CAMPO SANCHEZ