25.5.09

CRONICAS SOCIALES Y DE CULTURA LAGUNERAS.

En la sala de exposiciones de la Casa de los Capitanes Generales, de nuestra entrañable ciudad, tuvo lugar la apertura y presentación de la exposición de esculturas de Fernando Garciarramos, en homenaje a Louis Braille, en colaboración con el Ayuntamiento, Cabildo Insular y lo más importante, la Organización de Ciegos (ONCE).

La presentación, más como convidada de tenique (piedra dura) debió haber corrido a cargo de quien es o se supone, la anfitriona, la “ínclita” edila de Cultura Julia Dorta, pero sin embargo fue hecha por el poeta-escultor Fernando Garciarramos, quien estaba acompañado por su esposa la pintora Arminda del Castillo.

El señor Garciarramos dio una exhaustiva clase sobre Louis Braille, nacido en Francia, quien a los 4 años en un accidente doméstico perdió la vista. Cuando contaba 18 años ya tenía ideado todo un Sistema Braille, un alfabeto a base de puntos en relieve y, desde entonces los invidentes de todo el mundo pudieron salir de su marginación social, cultural y educativa. El braille no sólo hace posible que las personas ciegas reciban formación y que puedan obtener trabajo y desarrollar una profesión, sino que también les ha abierto de par en par al mudo de la cultura… Un universo entero de posibilidades. Garciarramos, lagunero de integración y hombre de importante cultura y casi un poliglota, dio las gracias a Louis Braille en varios idiomas: el español que se habla en Canarias, francés, inglés, sueco, alemán y ruso.

Intervino, con ese verbo fácil, entusiasta y didáctico, la consejera de AA.SS del Cabildo Insular de Tenerife, Cristina Valido, quien por esa filosofía innovadora que le caracteriza y que impregna  en todas sus intervenciones, dedicó parte de su perorata a ilustrar de Simproni ya que también se ofrecían algunos trabajos y del importante papel del Cabildo Insular, que trabaja con el objetivo de lograr normalización de la vida de las personas con discapacidad.

Cerró el acto Fernando Garciarramos, habida cuenta que la concejala Julia parecía un tanto ruborizada y casi en el limbo, rechazando el utilizar la palabra en libertad, como le correspondía.  Seguidamente el artista dio por finalizadas las intervenciones e invitó a los numerosos asistentes (un centenar) a contemplar una parte de su obra.

La nota de los asistentes la dio Ramoncito González de Misa, quien empujando al público le vimos inclinarse, bajar la testa y ¡oh!, sorpresa, fue para besar el anillo al obispo de la Diócesis de San Cristóbal de La Laguna a quien, por el público se le vio con indiferencia manifiesta, como uno más, ninguneado. Cruzamos nuestras miradas y creo, que tanto él como un servidor, en aquel instante notamos que debíamos moderar nuestros excesos de soberbia. Uno de los 7 pecados capitales – reconociendo que la humildad, al menos por mi parte, donde siempre hay ausencia de orgullo, esa virtud cristiana opuesta al orgullo y vanidad de otros que siguen empecinados, influenciados en marginar a determinadas clases sociales que viven faltas de amor y necesidades de todo tipo, espirituales y de subsistencia

FIDEL CAMPO SANCHEZ