La idolatría es la costumbre pagana de fabricar estatuas. Escrito está: Al señor adorarás, y a Él sólo servirás (Juan 4:8).
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En el mes de septiembre de 1993, Michael Jackson, rey del pop, recientemente fallecido de manera un tanto extraña, en los Ángeles, celebró un concierto en la explanada del muelle de Santa Cruz de Tenerife. Los organizadores del evento utilizaron una furgoneta recién adquirida, para los traslados del artista, durante su estancia en nuestra Isla. Al menos en esta ocasión no fue a la Isla de Canaria
El concierto como todos los de este icono, fue espectacular y el recinto se llenó a tope. Los dueños del vehículo pidieron a Michael que estampara su firma en uno de los asientos de su blanca tapicería. Como se conserva la furgoneta de marras, se rumorea que está en venta, eso sí, casi en contra de su voluntad, porque Michael Jackson siempre fue y seguirá siendo su ídolo musical. No obstante piensan que ha llegado el momento de desprenderse de la misma, pues la crisis y uno ingresos extra, que suponemos que serán más que abundantes, vendrían más que bien a la empresa familiar que en su momento la adquirió.
Como la mitomanía de hoy es sorprendente y no conoce fronteras, aprovechando que los recuerdos aún están calientes y, además, vivos por su fallecimiento ya que las emociones están a flor de piel, los dueños del histórico vehículo, han decidido vender dicho furgón, incluida la toalla que usara Michael para secarse las manos y la cara, junto con un calcetín sin usar que se dejó olvidado en el asiento Todo ello, con un precio de salida fijado, en principio, 10 mil euros, según la noticia que hemos oído en “Telenoticias 2 de T.V. Canaria”, o mediante puja en el portal eBay. Asimismo, los propietarios están dispuestos a una tasación directa, pero resaltando que, “el verdadero negocio será para el adquirente del fotingo”
Bueno, pues ya saben la pelota está en el “Aledo” y el “Avispero” preparado para darnos noticias interesantes, sobre ofertas, contraofertas y demás. Informan que la toalla y el calcetín permanecen depositados en la Caga Fuerte. ¡Mientras las demandas a Cáritas aumentan…que país!
Fidel Campo Sánchez
