¡Otro amigo más!, en nuestros recuerdos a quien la “intrusa despiadada”, ha segado el hilo de la existencia aquí en este valle de lágrimas, la tierra que en vida ha sido la de: Cecilio Bisshopp Hernández.
Gratos recuerdos de su persona guardados en nuestra memoria, pues lo conocimos por los años sesenta en el famoso y recientemente desaparecido Bar Castillo, que llevaba Luís Pérez al que todos cariñosamente conocemos como el “Pipeta”. Allí se reunía con sus amigos entrañables, que además compartían su afición al Futbol, deporte que practicó en su juventud, llegando finalmente, por sus conocimientos de dicha práctica deportiva, ha ejercer son singular acierto la tarea de Entrenador. En aquella simpáticas reuniones participaban jugadores del balón píe como Juan Padrón, Foncho el Canelo, Córdoba, Pinto y Argeo Pérez Godiño, que habían jugado a la pelota desde siempre. Llegando a ser de la plantilla del Estrella u otras importantes como la del C.D. Tenerife, y grandes aficionados del Barcelona, del Atlético y…
Otro lugar habitual de reunión, donde se hablaba de todo, incluido el Futbol, Baloncesto y de cuantos temas y bromas surgieran, fue el famoso estanco de don Álvaro González de Paz , con el recordado Juan Santana tras el mostrador, departía el amigo Bisshopp con personajes como Eduardo Núñez conocido por el Porreto, Paco Melián, Enrique el Peta, el cura Pedro Juan, que junto con Juanito Cabeza y Andrés Pérez Llombet eran los que se ocupaban del Canarias de Baloncesto, que tantas glorias consiguió para la ciudad de Aguere.
Con tan triste motivo hacemos presente a su hijos Cecil, Loly, Luís, Salva y Dani Bisshopp Flores, hijos políticos, nietos y demás familiares, la expresión de nuestra sincera condolencia.
Descanse en paz el alma de tan apreciable amigo y reciban también nuestro pesar sus amigos, muy particularmente Javier Basterra y todos los componentes tertulia del Bar Castillo, del Carrera, de la sociedad el Ateneo, pues Cecilio Bisshopp contaba con numerosas amistades en el seno de la sociedad lagunera.