Plenario del 14 enero del 2010
Con la venia, señor alcalde
Señoras y señores concejales
El portavoz del Grupo Municipal Socialista, Gustavo Matos, presenta en el punto núm. 8 del Orden del Día una moción para que desde el Ayuntamiento se impulse la creación de una "fundación pública humanitaria" que lleve el nombre del Padre José Anchieta Fundación que evidentemente está obligado a impulsar el Ayuntamiento basándose para ello en el artículo 2 de la Ley estatal 50/2002 de Fundaciones, amparada por el artículo 31.1 de la Constitución y o Ley de Fundaciones Canaria de 6 abril de 1998m que fue aprobada por el Parlamento Canario y refrendada, según establece el artículo 12 del Estatuto de Autonomía por el Jefe del Estado español.
Como la delegada de Patrimonio, señorita Cruci parece tener desconocimiento de este personaje lagunero de talla mundial ya que, al parecer, ha podido confundirlo con el Marco de los Apeninos a los Andes, relato de ficción en la novela del corazón de Edmundo de Armicis o quizás influencia por su niñez y por la obra representada en la Televisión. De una o de otra forma es hora de rectificar apoyando masivamente la moción del señor Matos y corregir yerros del equipo de Gobierno.
El profesor de muchas generaciones de laguneros, Leandro Trujillo, edil responsable de Cultura en este Ayuntamiento en los comienzos de la Democracia, entresacamos lo siguiente ”Antonio Rumeu de Armas, director de la Real Academia de la Historia dijo: Hay una bella plaza lagunera, conocida por el Adelantado donde se levanta una digna casona que la tradición señala como aquella donde nació y vivió el apostal del Brasil. Hay eruditos que ponen en duda la veracidad del natalicio en ella. Pero nadie duda, en cambio en considerar que dentro de sus muros se desarrolló la vida del beato durante la niñez y adolescencia que nos lleva a que se revisen plenarios del primer Ayuntamiento democrático para los que se debe recordar lo siguiente”:
Sabemos que en el ilusionado ambiente creado por la llegada de la primera corporación democrática en 1979, se desperezó el interés dormido por la figura de Anchieta; se celebró dignamente el 450º aniversario del nacimiento del Beato lagunero entre el 11 y 19 de marzo de 1984; la semana de actos fue clausurada en el Teatro Leal —ya teatro público— por los discursos del Alcalde y del Vicepresidente del Instituto para la Cooperación con Iberoamérica, Inocencio Félix Arias Llamas, en los que se proclamaba una acción decidida por la difusión de la importante obra de Anchieta «...el precursor de la cooperación...» —llegó a decir Arias—; También se resaltó por parte del alcalde Pedro González, el deseo entonces compartido de la creación de una Cátedra Anchietana en La Laguna «...de donde se irradie todas esas dimensiones humanas e intelectuales del Beato José de Anchieta...», todo ello se justificaba por la emoción del momento pero es obligado decir que fue una actitud que tuvo reflejos positivos en el bienio1984 a 1986, pues desde entonces se han dado pasos muy importantes en el sentido adecuado para fortalecer la memoria en la egregia figura y su vínculo con La Laguna.
“Sin apartar la mirada de la Casa de la Plaza Abajo, cuya adquisición se convirtió en uno de los objetivos prioritarios, se iniciaron entonces las gestiones para su compra que tuvo que esperar hasta 1989, con una transacción a tres bandas, que si bien hizo posible la municipalización de la casa, sin embargo dio lugar a la pérdida de la huerta aledaña, tan importante en este tipo de edificios históricos. Por otra parte, se generó una desacostumbrada actividad por el estudio de la obra escrita de Anchieta que tuvo como primer e importante fruto el libro José de Anchieta, vida y obra (1988), compendio de los estudios realizados bajo la coordinación del Departamento de Filología Clásica de la Universidad de La Laguna y editado por el Ayuntamiento, obra y esfuerzo que han resultado ser fundamentales no sólo para un más amplio y mejor conocimiento de la biografía y de la obra de Anchieta, sino también para el establecimiento de relaciones e intercambios entre Coímbra, São Paulo y La Laguna, los tres centros de mayor importancia —pero no los únicos— relacionados con Anchieta, estableciéndose importantes vínculos políticos, culturales y académicos a través del Atlántico, de lo que ha sido principal exponente, entendemos, los congresos conmemorativos del IV Centenario de Anchieta organizados en São Paulo, Coímbra y La Laguna en 1997. La Laguna fue distinguida por la UNESCO, sobre la base de su valor arquitectónico y modelo urbanístico, con el título de Ciudad Patrimonio y bien cultural mundial (1999), si bien de espaldas a la Universidad y en la actualidad se viene celebrando acertadamente el décimo aniversario de ese acontecimiento”.
Pero las ciudades poseen también el otro patrimonio, el patrimonio por excelencia que es el hombre; podríamos decir que la ciudad hereda el hálito espiritual de sus habitantes del pasado y del presente de cuyo alimento se nutre y constituye el legado más preciado. ¿Nos estamos olvidando del hombre obnubilados por la inmisericorde practicidad? No es posible, nos resistimos a creerlo. Como es sabido este año se cumple el 475º aniversario del nacimiento de Anchieta, efemérides que se anunció en el Ayuntamiento el pasado mes de marzo, pero a pesar del interés demostrado por algunos «anchietanos», lo avanzado del año nos hace volver a la realidad de la inexplicable indiferencia.
Pensamos que no debe seguir postergado el Proyecto de Anchieta. Consideramos que la mayor celebración que en estos momentos se puede hacer en su honor, evitando injustificadas dilaciones, es el anuncio oficial del Ayuntamiento Pleno de hacer suyo el proyecto de Anchieta, avalado tantas veces por los acuerdos municipales, por la anuencia de las instituciones cívicas y por el deseo de los ciudadanos en general, y que no pase más tiempo para que en un acto solemne y decidido se dedique al mismo la Casa de Anchieta, lugar hacia el que dirigimos colectivamente la mirada, como ha sido siempre. Añadamos finalmente que siendo Anchieta un patrimonio que trasciende los límites municipales, sería muy deseable que esta importante iniciativa del consistorio lagunero fuese apoyada sin reservas por el Gobierno de Canarias, el Cabildo Insular de Tenerife y los órganos competentes de la Administración Central. Y expresado lo recopilado del doctor Trujillo debemos añadir
Consideramos inadmisible que la tal Cruci, erróneamente apoyada por el portavoz de su Grupo, pusiera al descubierto sus carencias, y lo que es mucho peor que se atrevieran a ir contra la verdad histórica al manifestar que Anchieta se había marchado de niño a Brasil, cuando la realidad histórica es muy diferente habida cuenta que fue ya de adulto, después de h cursar estudios, junto con dos de sus hermanos, en la Universidad de Coímbra y que José de Anchieta era hijo del matrimonio entre Juan López de Anchieta, hidalgo vasco que tuvo que exiliarse y refugiarse en 1522, en La Laguna tras formar parte de una rebelión de comuneros contra Carlos V y que contrajo matrimonio con una la liberta María Díaz de Clavijo, aborigen o descendiente de judíos, por cuyo motivo, nuestro Anchieta, tuvo que soportar y sufrir las consecuencias de ser hijo de una esclava cristianizada que aquella sociedad injusta utilizaba para discriminar.
Por tanto, consideramos genial que don Gustavo ironizara al decir:”El Padre Anchieta no era Marco, por supuesto entendemos se refería a Marco el de los Apeninos a los Andes, relato de ficción de Edmundo de Armicis en su novela de corazón (1886) y llevada la Televisión en programación infantil. Como nos dijo indignado el escritor lagunero, don Eliseo Izquierdo, caballero del Padre Anchieta “estos errores de bulto y desconocimiento nacional canario no es propio y además condenable y vergonzoso en quienes alardean de nacionalismo canario, cuales son los de CC y muy de agradecer la defensa por quienes antes que socialistas españoles, son socialistas laguneros, a los que les quedamos muy reconocidos”.
A nosotros, canarios y laguneros de integración no nos extraña que doña Cruci Domínguez pueda actuar de la manera que lo está haciendo pues en fecha oportuna, sin respuesta como acostumbran, denunciamos como se rompió la puerta de la Capilla de La Cruz Verde que venía siendo utilizada para actos indecentes y lugar de defecaciones como asimismo que el propietario actual del edificio que fuera la mansión de los Quintana en la calle Herradores se haya apropiado de la sacristía instalando una motobomba para subir agua a un edificio. Asimismo está denunciado y sin resultado que se pueda considerar como que la dirección del Patrimonio no se esté llevando como mandan los cánones dado lo que hemos denunciado y puesto en conocimiento personalmente, en lo referido a la casa de la familia Mesa y al panel anunciador que dice, para burla de propios y extraños, desde hace un año aproximadamente: “Fue levantada a mediados del siglo XVIII por José de JACINTO DE Mesa y Castilla (1960-1780)” intolerable este baile de números y más todavía que no se corrija para dejar en mejor lugar eso de Bien Cultural y Patrimonio Mundial que de seguir como vamos cualquier día nos lo retira la UNESCO.
Y como final añadimos que Patrimonio Mundial no es solo el centro histórico o la ridiculez de regalar 100 gramos de gofio a los turistas mientras se permite la desaparición de los ancestrales molinos sino y además todo el Término Municipal: Tejina, Valle de Guerra, Guamasa, Bajamar, el campo, las eras y sus casas de labranza, la vegetación y muchas cosas más que se vienen ignorando.
Ante estos hechos nos vemos obligados a insistir en aquello de: “lo que natura non da La Laguna non presta”